Fiestas
Pujà i Rodà de Sant Roc (fiestas de interés turístico local)
El Diario Oficial de la Comunidad Valenciana publicaba, el 12 de junio del 2014, la resolución mediante la cual la Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo, declaraba la “Pujà” i la “Rodà” de Sant Roc de Burjassot como Fiestas de Interés Turístico Local de la Comunidad Valenciana, “en atención a que en estos festejos concurren características y peculiaridades de singular importancia y, además, son de indudable interés turístico”.
La “Pujà” i la “Rodà” de Sant Roc se enmarcan en la celebración, cada 16 de agosto, del Día de Sant Roc, patrón de la localidad. La jornada festiva comienza con la Misa Mayor en honor al santo, en la Iglesia Parroquial de San Miguel Arcángel y, por la tarde, la imagen del patrón recorre, en procesión y acompañada de autoridades, clavarios, vecinos y vecinas, las principales calles del casco antiguo de la población. A continuación, sobre las 23:30h, comienzan estos dos actos, la “Pujà” y la posterior “Rodà”, con los cuales culmina la jornada y que ahora han sido reconocidos como Fiestas de Interés Turístico Local de la Comunidad Valenciana.
Un poco de historia
Si bien la fiesta a Sant Roc en Burjassot data, como mínimo, del tiempo en que se construyó la Ermita (siglo XVI), fue en el siglo XIX cuando surgió la iniciativa de constituir una asociación voluntaria de vecinos solteros para celebrar la fiesta, tal como consta en la documentación coetánea. También consta que, allá por 1886, el Ayuntamiento ya tenía nombrado a un concejal dedicado concretamente a la fiesta de Sant Roc. En el trabajo de investigación realizado por Josep Vicent Castelló Ballester, titulado “Les festes de Sant Roc a Burjassot a la meitat del segle XIX” se plantea que la fiesta, tal como hoy la conocemos, dataría aproximadamente de 1861, en base a un escrito de esa fecha, así como de otro de 1868, en el cual se hace referencia a la constitución de una cofradía con estas palabras “Se constituye una cofradía voluntaria para solemnizar la fiesta del Patrón San Roque reclamada por los mozos de este pueblo que a continuación se expresan (…)”.
Los clavarios, que querían ofrecer una fiesta atractiva al pueblo, la dotaron de una serie de actos, que han quedado recogidos en diferentes testimonios. En el libro titulado “Topografía médica de Burjassot”, de 1921, se dice al respecto: “La noche de San Roque es costumbre subir la imagen de San Roque desde la Iglesia a su Ermita. Hacerlo en lúcida procesión precedida por los clavarios que disparan, cogidos con tenaza, infinidad de cohetes, resultando un acto típico y muy vistoso”, haciendo referencia a la “Pujà”.
Posteriormente, después del impacto que significó la Guerra Civil, la fiesta ha experimentado alguna adaptación, llegando a la década de los años 40, cuando se introdujo el rito de la “Rodà” tal como se lleva a cabo en la actualidad.
Descripción
La “Pujà” i la “Rodà” de Sant Roc, celebrada el 16 de agosto, día de la festividad del Santo, son dos partes de una misma ceremonia de una sorprendente belleza plástica; una ceremonia protagonizada, en primer lugar, por los burjassotenses (clavarios, porteadores, coheteros y público) pero también por la música, a cargo, tradicionalmente, de la Agrupación Musical Los Silos y por la pólvora, imprescindible en la tradición festiva de Burjassot. La “Pujà” es el itinerario que realiza la imagen de Sant Roc, desde la Iglesia Parroquial de San Miguel, donde descansa desde el término de la procesión en su honor, hasta su Ermita, ubicada en el entorno del Patio de Los Silos, declarado Monumento Histórico Artístico con carácter Nacional desde el año 1982. El actual anda de Sant Roc es una reproducción esculpida entre 1974 y 1975 a partir de la original, que data del siglo XVI. Esta reproducción salió, por primera vez, en la “Pujà” de 1975. La imagen es transportada a hombros de los llamados “porteadores” por diferentes calles del centro de Burjassot. Sin que la música deje de sonar, el Santo circula acompañado de los clavarios y de los miembros de la Peña El Coet de Burjassot que durante, todo el recorrido, envuelven a la imagen en un colorido pasadizo, a base del disparo de incesantes cohetes y bengalas. Tradicionalmente, numerosos vecinos y vecinas de localidad se unen a la comitiva que recorre las calles acompañando al Santo. El itinerario exacto de la “Pujà” es el siguiente: Iglesia Parroquial de San Miguel Arcángel, Carolina Álvarez, Mariana Pineda, Carretera de Llíria, Rubert i Villó, Fermín y Galán- García Hernández, Mártires de la Libertad, Plaza de Sequera, hasta desembocar en la Plaza de Emilio Castelar.
Es allí, a la Plaza del Ayuntamiento, donde llega el anda de Sant Roc, mientras suena el pasodoble “Valencia” (1924) del maestro José Padilla y la luz eléctrica se apaga, para protagonizar la “Rodà”. Frente a centenares de miradas, la imagen queda literalmente rodeada de círculos de luz y color, fruto del continuado disparo de cohetes, por parte de los clavarios y coeters, con sus típicas tenazas de madera, mientras la banda de música interpreta “Burjassot” (1955) de Juan José López Laguarda. A pesar de ser un acto breve, apenas dura unos minutos, la conjunción de sus tres elementos definitorios, la música, la pólvora y el entregado papel de las personas que acompañan a Sant Roc, le aportan una espectacularidad notable que, año tras año, los burjassotenses no quieren perderse.
Finalizada la “Rodà”, se reprende la “Pujà” hasta llegar a la rampa de la Ermita donde se realiza, desde hace unos años, “l’entraeta” del anda, envuelta en un pasillo de bengalas. Una vez en la puerta principal de la Ermita, los portadores levantan la imagen de Sant Roc para darle dos vueltas y despedirse así de los vecinos y vecinas que lo acompañan. Finalmente, entre aplausos y el volteo de campanas, Sant Roc hace su entrada en la Ermita.