Aprobado el nuevo Plan General de Burjassot, con mayor protección de la huerta, menor densidad de población y mejora de servicios
9 mayo 2019|Burjassot
La Comisión Territorial de Urbanismo ha aprobado definitivamente el nuevo Plan General, tras ser aprobado provisionalmente por el Pleno del Ayuntamiento de Burjassot el pasado día 8 de abril y el pleno de ratificación de ayer, 8 de mayo. Tras realizar modificaciones al plan motivadas por los anteriores acuerdos de la Comisión Territorial de Urbanismo de Valencia y los informes de las administraciones sectoriales recibidos durante su tramitación se alcanza la aprobación definitiva del Plan. Un PG que presenta novedades importantes ya que prevé proteger la totalidad de la superficie de huerta del municipio y no expandir el suelo urbano residencial, reduciendo la población potencial prevista en el actual plan.
“Tras más de 12 años trabajando en el futuro de Burjassot, por fin damos el último paso para que tengamos ya una nueva ordenación en nuestra ciudad, que tengamos la huerta protegida, que Burjassot pueda encarar su futuro sin presión demográfica, que tengamos nuestro patrimonio protegido, y que podamos desarrollar todos los espacios públicos encaminados a aumentar la calidad de vida y los servicios públicos. Ha sido un proceso larguísimo, pero el pleno de hoy supone el punto final y el inicio de una realidad” ha declarado el Alcalde de Burjassot, Rafa García.
El texto refundido del Plan General de Burjassot clasifica como suelo urbano 2.714.747 m² de suelo, como urbanizable 157.550 m² y como no urbanizable 629.961 m², de los cuales la totalidad están calificados como huerta protegida, de acuerdo con el Plan de Acción Territorial de Ordenación y Dinamización de la Huerta de Valencia (PATODHV).
El Plan General presenta, “una distribución reflexionada del término municipal buscando un crecimiento moderado de la población, el equilibrio entre la actividad económica y la protección del entorno y el patrimonio arquitectónico, paisajístico y natural, incrementando los espacios verdes y el desarrollo del empleo”. Además, tal y como señalan fuentes municipales, no se producirá ninguna reclasificación de suelo para construir viviendas, de ahí el no crecimiento del casco urbano, una medida que supondrá una población máxima de 40.791, frente a los 52.000 que preveía el anterior PGOU.
El nuevo PG protege la huerta de Burjassot como superficie con gran valor histórico, cultural y paisajístico, con el mantenimiento de los usos y la actividad de las alquerías junto a la creación de un Parque Público Natural de Huerta de 193.678 metros cuadrados. Estas medidas suponen la recuperación de mayor superficie de huerta respecto al actual PG y se protege la totalidad de la superficie de huerta. El desarrollo de los tres sectores de suelo urbanizable terciario deberá obtener una superficie de 193.678 m² de parque natural (PNL). Esta superficie de suelo con destino público, que es considerada como huerta protegida, supone:
- Conservar el carácter predominante de huerta de estos espacios
- Preservar áreas concretas de “huertos urbanos”, “puertas de entrada”, “paseos de borde urbano”, “integración de infraestructuras” u otras actuaciones públicas de interconexión huerta-ciudad.
- Blindar el paisaje y el uso agrícola de la huerta mediante la acción pública municipal
- Compatibilizar la explotación agrícola de estos parques con el disfrute lúdico, así como con la vertiente docente y recuperadora de la importancia histórica de los usos agrícolas.
- Asegurar la continuidad de los oficios relacionados con la huerta bajo la tutela de la administración pública, mediante la promoción de escuelas-taller, visitas escolares y lugares de trabajo directa e indirectamente vinculados a la propia explotación.
- Gestionar de manera pública el 33% de la superficie de huerta
Además, el PG ofrece un crecimiento de la ciudad en el que se equilibran los distintos usos del territorio y, consecuentemente, se genera un modelo sostenible desde el punto de vista urbanístico, económico y medioambiental incrementando, en este último caso, las zonas verdes urbanas, pasando de una proporción de zona verde por habitante de 5,34 m2/hab del plan anterior a 7,88 m2/hab. Se mejoran los espacios de ocio y esparcimiento municipal y la calidad de vida de los ciudadanos. En total, el PG prevé la reserva de 354.691 m² de zonas verdes integrantes de la red primaria de dotaciones y 65.427 m² de zonas verdes de red secundaria. A esta superficie se añadirá, además, aquella que cada uno de los tres sectores de suelo urbanizable debe prever y ejecutar. En total, existirá en Burjassot más de 420.000 metros cuadrados de zonas verdes y 629.961 metros cuadrados de huerta, lo que supone más de un millón de metros cuadrados de espacios verdes.
El suelo urbanizable propuesto, 157.550 metros cuadrados, desarrollado en tres sectores, se destinará principalmente a uso terciario y comercial que estabilizarán la actividad económica y comercial del municipio, ampliando, además, la oferta laboral. El nuevo PG no contempla nuevo suelo industrial específico por lo que los usos propuestos no generarán contaminación. En cuanto a viviendas, no se prevén nuevos incrementos de suelo destinado a nuevas zonas residenciales. No obstante, a través de actuaciones de reforma del casco urbano se permitirá construir más de 1.000 nuevas viviendas. En lo que respecta a la reserva de vivienda sometida a algún régimen de protección pública, el texto refundido del Plan General prevé 194.736 m² de techo edificable destinado a este fin. Considerando una superficie media por vivienda de 90 m² más la correspondiente superficie de elementos comunes, esta reserva supone una previsión aproximada de 1.700 viviendas. En total, el nuevo plan prevé pues la construcción de 2.700 viviendas como máximo, lo que supondrá el techo de habitantes que prevé el PG, que son 40.791, siendo en la actualidad la población de Burjassot de casi 37.600 habitantes.
En cuanto al soterramiento de las vías del metro a su paso por el municipio, el PG contempla la reserva de suelo necesaria para materializarlo, circunstancia que supondrá una mejora tanto del tráfico como del aparcamiento, mayor más seguridad en la movilidad de la población y una reducción del impacto acústico para los vecinos de la zona, así como la recuperación de los espacios actualmente ocupados por el trazado ferroviario, todo ello integrando paisajísticamente las infraestructuras vinculadas al transporte con el entorno de borde entre la ciudad y la huerta protegida, y creando espacios de transición.
Se impulsará la creación de nuevas calles peatonales, la definición de un entramado de circulación para bicicletas y nuevos espacios para el estacionamiento de vehículos bajo zonas verdes, áreas peatonales o de viario público. Se protegerá y conservará el patrimonio del municipio, delimitando una zona de casco histórico protegido catalogada como Bien de Relevancia Local, entre los dos monumentos que posee el municipio, el Castell de San Juan de Ribera y el Patio de los Silos.
Se crearán nuevas zonas terciarias-comerciales que posibiliten la implantación de nuevas actividades económicas en el municipio, y asimismo, se prevé también la reserva de suelo para la construcción de un Ecoparque y espacios para posible dotación municipal.
El Plan permitirá la implantación de viviendas en las plantas bajas de los edificios plurifamiliares, ofreciendo alternativas habitacionales a las personas con movilidad reducida. Otro de los objetivos que prevé el Plan, a largo plazo, es la bulevarización de la carretera CV-35, circunstancia que permitirá mejorar la integración de las tramas urbanas del municipio situadas a ambos lados de la citada infraestructura viaria y mejorar la condiciones de vida de los residentes cuyas viviendas recaen a dicha carretera.
El nuevo Plan General recoge, además, las necesidades y potencialidades generadas por el campus Universitario previendo la introducción de usos residenciales y actividades económicas peculiares (viviendas para estudiantes y personal vinculado a la universidad, espacios co-working, etc)